viernes, 6 de marzo de 2015

Infinito

Infinito,
ese invisible fenómeno
que quizá nunca
consiga alcanzar.


Si te paras,
piensas, y te preguntas,
¿qué es infinito?
¿dónde está? pues no lo veo,
¿alguna vez lo alcanzaré?


Mientras tanto,
tú buscas respuestas
a todas y cada una
de las preguntas,
solo para agradarme.


Me miras con cara de besarme,
con tu nariz achatada por los polos,
con tu boca que se te hace pequeña
cuando hablas,
con tus orejas, y tu pelo, ocultandolas,
me miras con tu cara.


Y no se te ocurre
 otra cosa mejor que decirme,
que tienes todas, y cada una
de las respuestas a mis preguntas.


Y yo, sin más,
te pido que me las digas
para que todo empiece
a cobrar sentido,
sin tener que pagar nada.


Te acercas
para decirme al oído
que el infinito es todo
lo que me amas,
que está en tu corazón,
y que lo alcancé, cuando te conocí.