Me atengo a mis alas de ave altruista.
Intento cazar presas
y sobrevivir para no ser comido
por el cazador
sin escrúpulo de matar un ser
que no hace otra cosa que vivir.
Vuelo por encima de sus cabezas
a la espera de que miren para abajo
sin ser grajo por encargo
aunque haga frío y tampoco
sea buitre empedernido.
Descanso
como gota de alma libre
y arma sin balas de atraco
a vida o muerte.
Espero
pero no desespero de la vida.
Todavía no lo encuentro
por más corazones que siga rompiendo
y más películas de las que me crea
el único protagonista.
Me idealizan de absurdo
y no veo hora de actuar
para mostrar, cambiar
y callar
con palabras y no balas
su triste realidad.
Que más bien o más mal
es irreal.
Lunar incrustado en piel
se mira sin tocar.
Alabanza gangrenada en ganas
de continuar adelante y ser excusa
pintada,
escrita,
hablada
y homenajeada
por grandes mentes.
Se sientan y duermen.
Es mi momento de atacar y devolver
sin revolver su masacre más cobarde.
Ahora, comienzo el vuelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario